Lecturas del día. Idel salterio.
Hechos 15,7-21;Salmo 95;Juan 15.9-11.
Proclamación del Santo Evangelio según San Juan:
Gloria a ti,Señor:
En aquel tiempo, dijo Jesús a discípulos: <<Como el Padre me ha amado, así os he amado, así os he amado yo; permaneced en mi amor. Si guardais mis mandamientos, permaneceréis en mi amor;lo mismo que yo he guardado los mandamientos de mi Pdre y permanezco en su amor. Os he hablado de esto para que mi alegría esté en vosotros, y vuestra alegría llegue a plenitud>>.
Homilía:
Hermanos(as)en la Palabra de Dios hoy un pasaje de San JUan capítulo 15,9-11,dos versículos no más, nos lega el mejor regalo que Jesús, nos puede hacer, si, su infinito amor, y la invitación, a hacer lo propio; nos recuerda que el amor de Dios Padre es el que da la vida, y que ese amor que Dios Padre tiene por su Hijo, es correspondido de igual manera, por el Hijo,y es más sublime su infinito amor, que trasciende hasta nosotros, nos pide, permanecer en el amor a Dios y así, permaneceremos en Él, pues quien ama al Padre, ama al Hijo, y ese inmenso amor, nos leba ha poder sentir la presencia de Dios trino morando en nosotros, su promesa no falla ,"si guardáis mis mandamientos y permanecéis en mi amor; lo mismo que Yo los he guardado y permanezco en su amor", así mismo para quienes permanezcan en mi amor yo permaneceré en vosotros, es la recomendación más grande de Jesús, guardar los mandamientos del Padre y permanecer en su amor, para asi lograr la vida eterna y la salvación.
"Tus mandamientos,Señor,nos aligeran la carga.
Discurso del amor, que baja como una cascada,del Padre a Jesús, y de él a cada uno de nosotros,para que luef¡go le demos curso en todos nuestros prjimos.Estamos ante una completa circulación de flujo de amor. ElSeñor nos pide no tanto que le amemos a él (que también),sino sobre todo que nos dejemos amar,que aceptemos su don.
Ello requiere una pronta y generosa respuesta,que se verifica en la observancia de los mandamientos,no algo impuesto,sino como actitud coherente con el flujo vital recibido,no de modo legalista, exterior,superficial, sino, en términos de vivencia. Así, la vida del discípulo permanece unida a la de Jesús (el sarmiento injertado en la vid) y ello procurará la verdadera alegría.
Señor, concedenos el gozo que procede del sentimiento profundo de la inmersión en el amor,por encima tantas veces de la realidad sensible, radicada en la fe.