ALLeluya, aleluya, aleluya, aleluya, aleluya aleluya, el Señor resucito. Jesús resucito y la vida él nos dió.
Hermanos(as), en esta vigilia pascual, La madre de todas la celebraciones eucarísticas y de toda la vida cristiana, nos hemos reunido en la casa del Señor, para ir descubriendo paso a paso, por medio de las lecturas que hoy son muy abundantes y ricas en contenido, el misterio de la salvación.
En, esta celebración, podemos desvelar el misterio de la redención, como el máximo regalo de Dios para nosotros.
La, Eucaristía de hoy, consta de cuatro partes:
En primer momento, tenemos, la liturgia de la luz,(lucenario)la bendición del fuego,donde todos encenderemos un cirio, o una vela, pero tomando la llama del cirio pascual, que a su vez ha sido encendido por el ministro que preside la celebración, tomando la luz nueva, (el fuego nuevo, de un hoguera preparada en el atrio del templo, y desde allí, se iniciará la procesión del fuego, hasta la puerta del templo, donde, el presidente llevando el cirio pascual, ya bendesido y con la luz nueva, presenta al pueblo esta luz, y dice: "Luz de Cristo vencedor", y nosotros respondemos,<< te adoramos Redentor>>, y allí, se encienden las primeras velas, o cirios, tomando la luz, del cirio pascual, no de otra fuente.
Seguidamente, el ministro, entra al templo y a la mitad de este repita la advocación anterior, respondiendo nosotros con la misma aclamación, y termina en el altar con una tercera presentación de la luz nueva al pueblo y responderemos igualmente.
Aclaro, toda esta celebración, se realizará en plena oscuridad en lo posible;llegados ya al altar, el ministro o el pregonero encargado, proclama el pregón pascual, normalmente es cantado y muy solemne, terminado este, se inicia ya la segunda parte de la Vigilia Pascual,(la liturgia de la palabra, normalmente, se deben tomar, siete lecturasdel antiguo testamento, con sus siete salmos y antífonas, y dos lecturas del nuevo testamento incluyendo en este caso el Evangelio de San Marcos.
Terminadas, las lecturas del antiguo testamento con sus salmos, se proclama la lectura de la carta a los Romanos, con su salmo, y seguido se canta solemnemente el aleluya, y se proclama el Santo Evangelio, encendiendo ya las luces del altar; se hará la homilía correspondiente.
El segundomomento, es la liturgia de la Palabra, donde recorreremos el antiguo y el nuevo testamento, enriquesiendonos con la palabra de Dios,desde el Génesis, hasta el Evangelio según San Marcos, encontramos todo un fluido manjar de vida y experiencia de Dios.
La, tercera parte tenemos la liturgia bautismal: La renovación de las promesas bautismales, la profesión de fe y la celebración de los bautismos, que se han preparado para esta noche tan especial.
En, esta parte, se bendice el agua para las celebraciones de los bautismos, y de igual manera los objetos que los fieles han llevado,muchos conservan la tradición de llebar botellines de agua bendita para sus hogares,igualmente con esta agua bendecida, somos rociados por el ministro para simbolizar así, que nos unimos en la muerte y resurrección de Jesucristo, muerte al pecado y vivos en Cristo.
Como cuarto paso, la liturgia de la Eucaristía,donde recordaremos el mandamiento de Jesús, "haced esto en memoria mía".Es,m este el momento más solemne de toda esta celebración, pues es donde se actualiza, se perpetua la orden de Jesús, hacer presente su mandato, seguir sus huellas y cumplir con mucho amor y seguridad lo encargado por nuestro maestro, el ministro celebrante, deberá poner todo su amor, todo su entusiasmo y empeño, en esta celebración, pues debe él recordar que está representando a Jesús, el único y máximo sacerdote de la humanidad.
"LA VIDA HA VENCIDO LA MUERTE.
Durante el Sábado Santo la Iglessia permanece junto al sepulcro del Señor,meditando su pasión y muerte,auscultando ese aldabonazo estremecedor que se clava en nuestro ser. A nadie suele recordársele tanto como a un muerto,cuya <<ausencia>> llena la casa. Tanto más en el caso de Jesús,acostumbrados a su presencia constante. De golpe estalla la noticia: <<No está aquí,¡ha resucitado!>>. Se produce un juego de contrastes: la pesada piedra ha sido removida,el cucificado ha resucitado,quien había muerto de atroz suplicio ha vuelto a la vida. Las mujeres se asustan,presas de la profunda emoción religiosa que nos invade frente a lo sobrenatural: ¡un abismo separa a los seres humanos de Dios! Resulta arduo proclamar la Buena Nueva, <<Cristo ha resucitado>>,porque esta verdad inaudita desafía siempre a la razón humana. Sólo se la puede acoger en la fe sencilla.
Nos dijeron de noche que estabas muerto, y la fe estuvo en vela junto a tu cuerpo....Con la vuelta del sol, volverá a ver la tierra la gloria del Señor"