El blog de cristo

Santos: Alberto Magno; Nª Sra. de las Angústias; Macuto;Leopoldo III;Didier.

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​​roclamación del Santo Evangelio Según San Lucas:

Gloria a ti,Señor:

En aquel tiempo,Jesús, para explicar a sus discípulos cómo tenían que orar siempre sin desanimarse,les propuso esta parábola: <<Había un Juez en una ciudad que ni temía a Dios ni le importaban los hombres. En la misma ciudad había una viuda que solía ir a decirle : ""Hazme justicia frente a mi adversario". Por algún tiempo se negó,pero después se dijo: "aunque ni temo a Dios ni me importan los hombres,como esta viuda me está fastidiando,le haré justicia, no vaya a acabar pegándome en la cara">>. Y el Señor añadió: <<Fijaos en lo que dice el juez injusto;pues Dios, ¿no hará justicia a sus elegidos que le gritan día y noche?; ¿o les dará largas? Os digo que les hará justicia sin tardar. Pero,cuando venga el Hijo del Hombre,¿ encontrará esta fe en la tierra?>>.

Palabra del Señor:

Gloria a ti,Señor Jesús.

Homilía:

Pero, cuando venga el Hijo del Hombre,¿encontrará esta fe en la tierra?...

Paz y bien hermanas(os) en Cristo, hoy el Señor,nos presenta el estilo de vida que Jesús nos propone para poder entrar en relación con el Padre Dios.

La parábola del Juez injusto, que hace justicia a la viuda, nos deja mucho que comprender, como Jesús mismo nos lo explica, si el ser humano que es malo, sabe hacer cosas buenas, con mayor razón nuestro Padre Dios, nos dará lo que nos convenga; este juez que le hace justicia a la viuda, simplemente lo hace por evitarse molestias, pero no porque le interesara la situación de esta; solo quiso quitarse un problema.

En cambio,la pregunta de Jesús: ¿encontrará esta fe en la tierra?; Pues miremos, esta mujer, que era muy pobre y sin importancia, insistió tanto al juez que lo canso y le hizo justicia; con Dios es lo contrario, Él no se cansa de otorgarnos su inmenso amor y su misericordia por nosotros, por ello sigue esperando a que cada uno de nosotros, sintamos en nuestro corazón ese deseo de amarlo y entregarnos a Él, por su infinito amor; EN CAMBIO, JESÚS, NOS PIDE,SER PERSEVERANTES EN LA ORACIÓN, NO DEJAR DE IMPLORARLE A DIOS POR NUESTRAS NECESIDADES Y POR NUESTRA CAPACIDAD DE AMARLO Y TENER SEGURIDAD CONFIANZA EN ÉL.

Hoy, estamos llamados, a reflexionar y a dejarnos amar por Dios, a ser hombres y mujeres de verdadera oración y confianza en Dios, una oración no aburrida ni estática, sino dinámica y alegre segura que recibiremos de Dios lo que le hemos pedido y nos lo merecemos.

Concluyo, es el momento, de volver los ojos a Jesús, y desde lo más intimo de nuestro ser, entregarnos a amarlo y hacer que more con nosotros; creer sin vacilar y estar seguro, que si le hemos pedido a Dios lo que nos conviene, pues Él nos lo concederá si nos combiene, pero si no hay fe, no habra esperanza y por lógica no habra conversión ni redención, pues esta la REDENCIÓN, aunque esta para todos, no llega si yo no la acepto yo.