Santos: Martirio de San Juan Bautista;Sabina;Beatriz. 1ª del Salterio.
Proclamación del Santo Evangelio según san Mateo:
Gloria a ti,Señor Jesús.
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos esta parábola: <<Se parecerá el reino de los cielos a diez doncellas que tomaron sus lámparas y salieron a esperar al esposo. Cinco de ellas eran necias y cinco eran sensatas. Las necias,al tomar las lámparas,se dejaron el aceite;en cambio las sen sensatas se llevaron alcuzas de aceite con las lámparas. El esposo tardaba,les entró sueño a todas y se durmieron. A media noche se oyó una voz "¡Que llega el esposo, salid a recibirlo!".
Entonces se despertaron todas aquellas doncellas y se pusieron a preparar sus lámparas. Y las necias dijeron a las sensatas: <<"Danos un poco de vuestro aceite,que se nos apagan las lámparas". Pero las sensatas contestaron: "Por si acaso no hay bastante para vosotras y nosotras,mejor es que vayáis a la tienda y os lo compréis.". Mientras iban a comprarlo,llegó el esposo, y las que estaban preparadas entraron con el al banquete de bodas y se cerró la puerta.
Más tarde llegaron también las otras doncellas,diciendo: <<Señor, Señor, ábrenos." Pero él respondió: < "Os aseguro: que no os conozco". Por tanto, velad,porque no sabéis el día ni la hora>>.
Palabra del Señor:
Gloria a ti,Señor Jesús.
Homilía:
Estad preparados y con las lamparas encendidas, porque no sabéis, ni el día ni la hora en que llegará el Señor.
Paz y bien hermanos en Jesucristo, una ves más seguimos la lectura y la meditación de la Santísima Palabra de Dios, y su enseñanza de vida para nosotros:
Si, hoy Nuestro Señor por medio de san Mateo, nos recuerda lo importante que es la oración para poder permanecer en gracia de Dios, y poder pertenecer a su reino y no ser excluidos de él, por la falta de nuestro aceite en las alcuzas, que en nuestro tiempo es, esa falta de oración y de amor, de caridad, y servicio a Dios y a los hermanos.
En, otras palabras, el ser humano, siempre debe permanecer en constante, vela y espera de su Señor, nuestra vida, no debe estar en confusión o sin las energías, y los deseos de estar con Jesús, para así no quedarnos fuera de su reino.
Esta, parábola de las doncellas necias y sensatas, puede ser hoy, mejor, es hoy en este mundo moderno, donde el valor por lo espiritual se ha perdido tanto de gran importancia y sumo valor; al ser humano de ahora, estas doncellas lo pueden representar a la perfección, en un mundo, donde los hombres y mujeres andamos tan sumergidos en las cosas materiales, que nos olvidamos de lo principal, del amor a Dios y de cómo sacar el espacio para su encuentro, para , y para poder ser elegidos, por haber estado preparados, con el alma limpia, confesados, reconciliados con Dios y con la sociedad, y así podremos al igual que las doncellas sensatas, poder entrar de verdad en el Reino de Dios, tantos hombres y mujeres, que andamos por este mundo, desprevenidos, preparándonos en todo, menos en lo esencial, en buscar un mejor encuentro con Dios, y así poder algún día, descansar en su paz, si hermanas(os) lectores de este bloc, hoy estamos invitados al cambio y a probeernos del mejor aceite en las alcuzas de nuestra vida para poder entrar al banquete de las bodas del Señor.
Concluyo:
Tiendas cerradas...
Normalmente, en los tiempos de Jesús, las tiendas y los comercios a media noche ya estaban cerrados.
Entonces, ¿como en el momento clave de la noche de las bodas del señor, no se puede ir a comprar el aceite que se necesita para la lámpara, porque este preparativo hay que hacerlo antes y con calma. Si, hay cosas que hay que preveerlas con antelación, que ni se improvisan ni se pueden comprar, hay que estar listos para actuar.
Lo mismo, nos pasa a nosotros hoy, como ayer, en el encuentro con Jesucristo no podemos obtener lo que no hayamos desarrollado en nuestro interior.
Si, nuestra vida cristiana es pobre y descomprometida,difícilmente encontraremos una tienda abierta a media noche, o en el momento indicando, para obtener el aceite necesario para el encuentro con el Señor y su fiesta de bodas.
Salvo aquella en la que se encuentra el sacramento del perdón, y la reconciliación, el bálsamo de la misericordia.
Y, es en esa tienda, donde podremos encontrar nuestro derecho a ingresar al encuentro con Dios,hoy día, la debemos encontrar abierta a diario en nuestro corazón, y acercarnos a la Santa Iglesia, la tienda de la reconciliación, arrepentirnos, de todo los pecados, pedirle perdón a Dios, por esas faltas de amor y caridad, por no haberlo escuchado y aceptado a tiempo, reconocernos necesitados de su amor y y de su perdón,de su infinita misericordia, y de rodillas ante el confesor, que solamente representa al mismo Dios, pedirle perdón por todo el mal echo, y por la falta de amor a Dios, y pedirle nos otorgue el regalo de su amor y su perdón, y así como las doncellas sensatas, lograron entrar al banquete de bodas, porque estaban preparadas, arrepentidas, con buena fe y aceite en sus alcuzas, nosotros, arrepentidos, confesados y preparados, llenos del amor de Jesucristo, podremos ver que Él mismo nos prepara nuestras lámparas y alcuzas y así, tendremos todo la Luz y el amor necesario para vivir con Dios.
Arreglémonos, ya con nuestro Señor, dejemos que su Luz, nos transforme y obtengamos su perdón y un puesto en su banquete de bodas, no por nuestros méritos, sino por su infinita misericordia, que acoje a todo aquel que lo busca con sincero arrepentimiento, amor y deseoso del su perdón.
Jesús, Jamás nos desconocerá, si no lo desconocemos, pero si lo desconocemos, el tampoco nos podrá decir que nos conoce, será lo contrario, nos dirá como a las doncellas necias, "OS LO ASEGURO: NO OS CONOZCO".
Por tanto velad, y estad preparados, porque no sabéis ni el día ni la hora.
"Que nunca me quede, Señor, sin el aceite de la lámpara que ilumina la noche del encuentro con Tigo".